La Crónica de Hoy, 21 de agosto de 2001
Cada año, desde hace 47, la revista política de mayor tradición en México reproduce la misma página con las fotografías de sus fundadores. Se trata de una docena y media de escritores que en 1953 renunciaron a la revista Hoy para acompañar a José Pagés Llergo en la aventura de fundar el semanario Siempre!
Esa galería da cuenta de la pluralidad, tenida como valor fundamental en esa publicación, que su creador animó en Siempre! El socialista español Indalecio Prieto y el espléndido cronista José Alvarado, aparecían allí junto a Nemesio García Naranjo a quien se consideraba adalid del conservadurismo que se enfrentó a la revolución mexicana. Vicente Lombardo Toledano el filósofo que fundó la CTM para luego ser expulsado de ella, Antonio Arias Bernal cuyas portadas ilustraron los primeros siete años de la revista y el incisivo Renato Leduc colaboraban cada semana lo mismo que el discutible Roberto Blanco Moheno, el crítico teatral Rafael Solana, la entrevistadora venezolana Rosa Castro y don Francisco Martínez de la Vega, comentarista político en cuya prosa la elegancia iba de la mano con la contundencia.
Ese elenco participó en la fundación de Siempre! cuando José Pagés Llergo fue despedido de la revista Hoy que había dirigido durante cinco años. La causa, ahora harto conocida pero digna de recordarse, fue la publicación de una fotografía que mostraba a Carlos Girón, yerno del ex presidente Miguel Alemán, extasiado mientras miraba a la bellísima bailarina que tenía delante suyo en un show en París. Junto a él su esposa, Beatriz Alemán Velasco, observaba notoriamente disgustada el embeleso de su marido.
Pagés Llergo publicó la foto a plana entera y la protesta del poderoso Alemán, que apenas hacía unos cuantos meses había dejado la presidencia, llevó a los dueños de Hoy a ponerle una condición al periodista tabasqueño. En adelante todo el material a publicarse, lo mismo texto que fotos, sería revisado por los propietarios de la revista, Rafael Lebrija y Alfonso Arrache. La reacción de Pagés (recordada por Rosa Castro quien a su vez es citada por Rafael Rodríguez Castañeda en su libro Prensa vendida) fue de antología: mientras él fuese director de un periódico nadie, absolutamente nadie, tendría derecho a poner los ojos en cualquier material que estuviera sobre su escritorio.
Así fue como Pagés se quedó sin trabajo pero solo por pocas semanas. Martínez de la Vega recordaría 22 años la reacción de los colaboradores de Hoy que se marcharon con su director para fundar la nueva revista que apareció el 27 de junio de 1953.
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